top of page
  • Foto del escritorMarketing Intfresh

Debilidades del comercio internacional argentino: causas y perspectivas

Mientras otras naciones del mundo incrementan los flujos del intercambio y firman acuerdos regionales, nuestro país le da la espalda a la apertura. Radiografía de un deterioro.



El año 2022 mostró un récord histórico en el intercambio de bienes y servicios entre las naciones del planeta. Las exportaciones de todos los países sumadas representaron cerca del 29% de PBI mundial, cuando en el año 2000 apenas llegaban al 24%. Además en 2022 el stock de inversión extranjera directa hundida global superó los U$S 46 billones, cuando en 2000 solo superaba los U$S 7 billones.


Durante los primeros 22 años del corriente siglo las naciones de Asia fueron las gran ganadoras: en su conjunto elevaron su participación en el intercambio global a un 37% (evidenciando un crecimiento de casi 11 puntos). Entretanto, América Latina apenas supera el 3%, lo que mantiene a la región en un lugar marginal.


De todas, más allá de esta escasa relevancia comparativa, algunos países latinoamericanos lograron avances significativos. Por ejemplo las ventas externas de Costa Rica, Paraguay, Colombia crecieron más del 300% en dólares; las de Brasil, Guatemala y Chile crecieron más de 400%; Uruguay y Ecuador avanzaron más del 600% y Bolivia y Perú experimentaron alzas formidables de más de 1000%.


Argentina apenas creció 235% durante el período analizado. El único país que tuvo una performance peor que el nuestro fue Venezuela (-50%).



Retroceso comparativo

El año pasado el ranking de países exportadores de América Latina fue encabezado por México (superó los U$S 580 mil millones); el segundo lugar correspondió a Brasil (U$S 335 mil millones); y el tercero a Chile (U$S 100 mil millones). A pesar de alcanzar un récord de ventas externas (explicable por los elevados precios internacionales), la Argentina quedó relegada al cuarto lugar (U$S 88 mil millones).


¿Qué ocurre que Argentina pierde relevancia como jugador del comercio internacional? A una macroeconomía desordenada y a la fragilidad de las instituciones debe sumársele un Estado sobredimensionado que impacta sobre la competitividad. El país también convive con un deterioro de su infraestructura. Y los problemas macroeconómicos fueron dando lugar a un marco regulativo complejo y enredado.


Desacople externo


Otro gran tema es que la Argentina no evidencia una vocación por participar de acuerdos a nivel institucional internacional: la vinculación comercial con otras naciones del planeta no parece estar en la agenda de nuestro país. Basta señalar que durante lo que va del siglo XXI otras naciones del planeta firmaron más de 250 acuerdos regionales entre sí, que permitieron que en la actualidad el 70% de todo el comercio global se efectúe entre mercados con aranceles de 0%. Mientras tanto, nuestro país le da la espalda al fenómeno.


La debilidad comparativa actual de la Argentina a nivel del comercio exterior es evidente: hoy el país acapara apenas el 0,3% de las exportaciones globales y cayó tanto la inversión extranjera recibida en nuestro país como la participación de las inversiones de compañías vernáculas en otros países. Y es sabido que esto a la corta o a la larga impacta tanto sobre la disponibilidad de divisas, la inversión y el crecimiento económico, como en lo que hace a la recaudación fiscal, el nivel de los sueldos y la calidad de los empleos.

36 visualizaciones0 comentarios
bottom of page